top of page

Editorial 553 - Y todo por el amor al dinero.

  • Foto del escritor: Cuerpo Editorial
    Cuerpo Editorial
  • 7 dic 2024
  • 2 Min. de lectura

Que la gracia, paz y amor del Señor Jesucristo sea en todos ustedes, amados hermanos, en su espíritu, amén.

Amados hermanos, el hermano que escribe relata un suceso ocurrido este mismo día en su trabajo secular. Un varón inconverso trató un tema importante aún y sin tener el Espíritu Santo fue capaz de atisbar el valor de ser sujeto, obediente y disciplinado en no ser amantes de riquezas o el dinero.

La frase de este tema fue dicha por este hombre quien, seguro de su postura, las familias se deterioran porque no tienen buena comunicación interna entre padres e hijos y los padres de las nuevas generaciones son menos responsables porque esperan que sus hijos puedan ser autodidactas o pueden gestionar vivencias sin experiencia de por medio.

Las juventudes están cada vez más imantadas por la idea de poseer todo. El mundo actualmente trabaja en eso desde su niñez -y se mete en las conciencias de los menores de muchas maneras muy sutiles-. La belleza, el poder, la bebida e ingesta o drogadicción que supuestamente logran dar estatus o valor terminan siendo agentes de incapacidad mental, motriz o apagar para siempre la vida de estos incautos.

Reconoció que la instrucción en casa es mejor (si es que están en Cristo, por supuesto) que las otras tres instituciones sociales: escuela, gobierno y religión.

Mencionó que los hijos no deben ser criados como cómplices de fechorías de los padres, sino de lo que bueno que los padres no pudieron ser.

Y si esto, a sabiendas que es conocimiento de lo de abajo y terrenal lo explica bien ¿Cuánto no más y mejor en lo espiritual si tuviera acceso al Espíritu Santo?

Amados, no es a través del dinero que se consigue amor y atención. No son las compras de caprichos como se consigue obediencia o disciplina como tampoco el buen juicio llega por medio de sustitución de los padres por terceros en la vida de las criaturas.

Solamente por medio del Espíritu Santo es que la humildad de Cristo nuestro Señor se aprende y así mismo los padres sean los únicos quienes enseñen a sus vástagos para buscar hacer el bien sin ningún interés extra en casa y no permitir se forjen en la tele, calle, escuela o internet sin supervisión fuerte y ocupada.

 Que el amor, la gracia y paz del Señor Jesucristo sea en su espíritu, queridos lectores, amén.

Comments


Si tiene alguna duda, sugerencia o comentario, no dude en ponerse en contacto con nosotros al siguiente correo: lasanadoctrina2014@gmail.com

 2024 Buenas Nuevas, Mty. Mx.

bottom of page